Después de la semana pasada en la Illa de Buda, Juan me ha dejado volver a acompañarle con una buena excusa. Dejarle mi Naranjito. El día era fantástico, y el sol ya daba de lo lindo cuando me he levantado a las 8. Puesto que hacia poco viento y el mar estaba tan quieto hemos decidido hacer un recto mar adentro buscando los barcos que esperan descargar en el puerto de Castellón. Parece que están cerca, pero hemos hecho unos 7 Km. de ida, y todavía nos hemos quedado lejos, eso si, ya se oían sus motores.
Pese a lo bien que estaba el mar, para no perder la costumbre me he comido mis buenas cuatro olas orilleras, quedándome chopado como nunca. También es verdad que me he quedado en la rompiente para recuperar la botella que la primera ola me había arrancado. Si no llevo agua para beber, no soy nadie remando. El Rotomod Ysak se ha comportado genial (como siempre) ante el envite de las olas.
Cuando voy con Juan, la conversación va sola…..y en un momento me he percatado que un pesquero venia hacia nosotros. Las referencias se pierden en mar abierto y parece que el barco va hacia ti. Estas situaciones tan lejos de la costa, me imponen demasiado. Si ante ti solo ves agua y mas agua…..también es mas fácil (al menos para mi) marearse. Esta bien navegar mar adentro como forma de probar nuevas sensaciones, pero la forma de kayakear que mas me atrae, es la de navegar cerca de la costa.
Parece que hay gente que le da mas prioridad al «como» se rema que al «donde». Lo digo porque volviendo a la playa , a mucha distancia de la orilla nos hemos cruzado con un Prijon Cruiser. Cual ha sido nuestra sorpresa al ver que era al conocido (en la zona) como kayakista nudista. Un chico de edad media y de buen ver que rema en pelotas. Habíamos oído hablar de el , pero no me llegaba a creer que realmente existía. El no estaba muy por la labor de charlar y tenia cierto recelo de que nos arrimásemos. Me imagino que kayak-nudista no debe ir ligado a lo de kayak-exhibicionista ( de estos hay muuuuuchos).
No debe estar mal esta modalidad de remar, pero no me gusto en este palista, lo lejos que remaba de la playa solo, y sin chaleco (elemento que imagino que debe estar prohibido en el kayak-nudismo). Tampoco me ha molado la postura que llevaba, con las rodillas por fuera de la bañera, pero debe ser el precio a pagar para que el sol te broncee tus partes pudorosas. Pero asi tienes mas fácil un vuelco. En fin, lo hemos dejado marchar pero me ha quedado mal sabor de boca al no dar el chico pie a que le enseñase mi pegatina del nude kayak club: creo que le hubiese encantado.